Vida útil de videocasetera y VHS (Nota de 1988)
El uso demasiado asiduo de la cinta virgen hace que ésta se vuelva abrasiva y afecte los cabezales.
PRIMEROS AUXILIOS
Conviene consultar la vida útil de un casete antes de utilizarlo para grabar programas del aire. Su uso indiscriminado puede redundar en una calidad de imagen pobre y en la necesidad de cambiar todo el tambor rotatorio. Tampoco conviene utilizar la velocidad SLP en caseteras NTSC a las que se les hizo el cambio a norma PAL. Esta velocidad es privativa de la norma
Carlos I, Luis XVI y Ana Bolena son tres casos célebres de figuras históricas que perdieron sus cabezas por entrar en oposición con algún jefe de Estado o grupo político. Actualmente, sin embargo, el descontento popular se ma- manifiesta de otras maneras y el último en morir guillotinado fue Alain Delon en Dos contra la ciudad (Video Movie). Paradójicamente, día a día los habitantes de nuestra ciudad corren el riesgo de perder la cabeza, no la suya, es cierto. Más bien la de su videograbador. Sucede que en el caso de las caseteras las cabezas no ruedan, pero giran y giran.
Consultamos a un service de larga experiencia en el arreglo de caseteras y nos indicó que en 7 u 8 años tuvo que atender entre 20 y 25 casos de cabezales gastados. Lo más escalofriante del caso es que cuando se descubre que una cabeza ya no sirve más, no basta con cambiar la unidad averiada, hace falta cambiar todo el tambor rotatorio. El típico caso del tambor que se fue al bombo.
Los cabezales de video que contiene el tambor rotatorio vienen preajustados de fábrica. El alineamiento de los mismos, de acuerdo a nuestro entrevistado, es micrométrico de modo que solo puede reponer la unidad la empresa de origen.
Vida útil
En Binorma TV Color nos comentaron sobre una experiencia que tuvieron en donde una telenovela pudo más que una videocasetera National 8610 necesitandose reemplazar el tambor rotatorio. De la charla surgió que la virginidad de las cintas en blanco no es eterna. Una clienta de la empresa utilizó durante varios meses la misma cinta para grabar una telenovela que se transmitía todos los días. El resultado fue que una casetera con cabezales de 3000 horas de vida útil necesitó un re- cambio de tambor tras 800 horas de uso. Sucede que la cinta virgen puede utilizarse solo un número determinado de veces. Si bien la capacidad de regrabado de un casete varía de marca a marca, utilizar una cinta más de 100 veces puede ser perjudicial. El uso demasiado intenso al que se somete al tape determina que las partículas de óxido metálico comiencen a desprenderse. Cuando se llega a este punto, el casete se torna abrasivo y afecta irremediablemente las unidades de captación. Si tenemos en cuenta que un tambor cuesta 150 dólares (muchos australes de acuerdo al cambio oficial), uno se pregunta si no es más barato comprarse algunas cintas de recambio en lugar de correr riesgos con los cabezales.
Una buena práctica es consultar el prospecto que viene con la cinta virgen para asesorarse sobre el número de veces que se puede regrabar. No es bueno correr el albur. Cuando la imagen se vuelve defectuosa caben dos posibilidades: o el casete ya superó su vida útil, o los que superaron su vida útil fueron los cabezales.
SLP
No conviene tampoco utilizar la velocidad SLP en una casetera NTSC binor- mateada. La velocidad SLP es privativa de la norma NTSC. En este sistema, la velocidad SP garantiza 2 horas de grabación, la velocidad LP cuatro y la SLP seis.
Cuando se usa esta última velocidad en una casetera transformada a la norma Pal, se consiguen hasta 9 horas de grabación en una sola cinta, pero esto excede el uso normal del equipo produciéndose una abrasión intensa con el consecuente peligro para los cabezales.
La unidad de captación de nuestra casetera no es el tambor de Tacuarí. Una cinta gastada o que desfila a demasiada velocidad es como una venda en los ojos de una persona o una mordaza antes que el repositorio de información útil que la unidad lee copiando la acción de un telegrafista cuando recibe un mensaje en tira. ¡Ni muero contento ni hemos batido al enemigo!. La cinta limará la superficie útil de los cabezales dejándolos fuera de acción. El alerta va dirigido a quienes utilizan para grabar un mismo programa en forma periódica o que acostumbran a meter cualquier cinta en su casetera sin consultar sus antecedentes.
Esperamos que estas líneas los haga recapacitar y puedan salir a la calle con la cabeza en alto pues su videograbadora funciona con todas las de la ley. Recordemos, las videograbadoras acéfalas nos sirven a nadie, tratémoslas con cariño
Autor: Estanislao Klimaszewski
Nota de Revista Videoclub de 1988
Deja tu comentario