Este libro resulta decepcionante si se lo compra esperando una investigación sobre el formato y el negocio del VHS en los 80s. Solo cuenta con una introducción que contiene algunos datos muy generales sobre las cintas de video e impresiones personales de Jacques Boyreau. Luego se dedica a mostrar tapas y contratapas que el autor considera importantes para ilustrar la época de oro del VHS y su rol de difusor de esas películas clase B que anteriormente solo circulaban en algunos cines marginales.
De todos modos, no deja de ser un interesante compilado de bellas carátulas y cajas de video. Especialmente recomendado para quienes no coleccionan el formato pero lo recuerdan con nostalgia y quieran poseer algunas reproducciones.